1 Ubicación excelente
2 Personal cálido
3 Desayuno delicioso

1 Falta de tetera
2 Aire acondicionado mejorable

Llegué, probé y lo reseñé

Este encantador hotel ofrece una experiencia única en una ubicación tranquila, a solo minutos del bullicio. Desayunar con productos locales en el patio es mágico. Las habitaciones son limpias y decoradas con esmero. Los anfitriones son cálidos y acogedores, brindando un servicio excepcional. ¡No te lo pierdas!

Nos encantó la ubicación del hotel, en un rincón tranquilo de la Ciudad Vieja, pero a solo unos pasos del bullicio. Las habitaciones estaban decoradas con mucho esmero, lo que le daba un toque especial a nuestra estancia. Además, el desayuno en el patio, rodeados de plantas, fue una manera perfecta de empezar el día con energía.

El aire acondicionado era un poco ruidoso durante la noche, lo que dificultó el descanso de algunos en nuestro grupo.

La ubicación del hotel es perfecta para disfrutar de la paz y al mismo tiempo estar cerca del centro histórico. Los platos fríos ofrecidos en el desayuno estaban llenos de sabor y frescura, haciendo que las mañanas fueran muy agradables. Sin embargo, el aire acondicionado era un poco deficiente y no había muchas opciones de entretenimiento para las familias. Además, la ausencia de tetera en la habitación fue un punto a mejorar.

Ubicació tranquil·la, a un pas del centre. Ambient acollidor, tracte càlid de l’equip. L’esmorzar deliciós, amb productes locals. Habitacions netes i ben decorades, un petit tresor per descobrir. Ideal per relaxar-se i gaudir de la bellesa de la ciutat.

Pasamos unos días increíbles recorriendo la nueva ciudad, disfrutamos de su vibrante ambiente y sus tiendas encantadoras. El personal fue muy amable y nos ofreció recomendaciones para restaurantes locales. tuvimos la suerte de comer en el patio, rodeados de flores, ¡una experiencia memorable!

A mis hijos les habría encantado que tuviera más actividades para niños.

disfruta de un toque familiar en rhodes con un desayuno delicioso de gran calidad

Cava D'Oro es un pequeño hotel de ensueño. La atención es cálida, llena de cariño y está perfectamente ubicado cerca de la hermosa ciudad vieja. El desayuno en el encantador patio es toda una experiencia. ¡Definitivamente el mejor lugar para una escapada romántica!

El hotel tiene una ubicación tranquila, a solo 2 minutos a pie del centro del casco antiguo. El desayuno incluye productos locales, pero no hay tetera en la habitación. La atención de George y Alexia hace que la estancia sea memorable. Aproveché el alquiler de bicicletas para explorar la ciudad.

Al entrar, sentí un ambiente acogedor por las paredes de piedra y el mobiliario de hierro. El desayuno en el patio, rodeado por la ciudad medieval, fue un buen comienzo para el día. ¡No olvidaré esa experiencia de disfrutar de frutas frescas mientras conocía el lugar! Me encantó la cercanía con muchas atracciones.

El aire acondicionado tenía un ruido que dificultó el descanso en la noche.